Diligencia de Granada Lanjarón a su paso por el Balneario
Sacado de un folleto editado por el ayuntamiento de la localidad de Manuel Mesa Torres. Nosotros le hemos incorporado algunas fotografías de la época
¿Cómo era Lanjarón hace un siglo? ¿Qué acontecimientos dignos de mención se sucedieron en aquella época? Pocos son ya los vecinos centenarios de Lanjarón que residen en esta singular villa alpujarreña que puedan describirnos los acontecimientos acaecidos entonces. Sin embargo, gracias a los periódicos de la época, es posible reconstruir parte de la vida de aquel pueblo al releer aquellas lejanas noticias que nos adentran en las penurias de sus gentes y en la prosperidad que de los nuevos proyectos se cernían con vistas a un futuro, de cuyas buenas gestiones, en la actualidad, disfrutamos todos los que tenemos la dicha de residir en este singular paraje.
Se han seleccionado diez textos, de entre los muchos y variados que fueron publicados en diferentes periódicos (El Defensor de Granada, Gaceta del Sur, La Alianza, El Triunfo, La Publicidad), que nos dan una visión global del pueblo: la construcción y mejoras de su emblemático balneario, la importante proyección que de sus aguas se hacían llegar a todo el mundo, allá cuando la luz llegaba tenue de las primeras fábricas de energía eléctrica por entre las cascadas de riachuelos para iluminar, entre otras muchas cosas, la nueva ermita ubicada en el Cerro de la Cruz, el Colegio de la Santísima Trinidad y las instalaciones del Círculo Católico San José.
Repasamos también la vida productiva, principalmente agrícola, de aquel Lanjarón, donde el caciquismo se hacía patente, incluso, cambiando duros por 18 reales, y asistiendo a todos los actos que se celebraban en el municipio.
Hemos dejado para otra ocasión otras muchas e interesantes noticias, como el famoso timo de la dama Argentina, en 1908; las excursiones que los bañistas hacían, principalmente, a los pagos del Castillo y Paraíso; la celebración de los carnavales o las fiestas en honor a la Virgen del Rosario.
Manuel Mesa Torres
Lanjarón Fuente de la Plaza 1910
Lanjarón, es el más acabado adorno del bordado de flores, el precioso fleco o el caprichoso encaje del Valle de la alegría; su último prendido, donde la coquetona naturaleza puso todo el mayor esmero, así como aquellas arrebatadoras mujeres, que, al terminar su vistoso tocado, colocan una flor encantadora entre las ondas de sus cabellos, o un descuidado lazo en un pliegue caprichoso de su falda.
Lanjarón es el canastillo dorado donde una beldad artística coloca entremezcladas flores celestiales, de delicadísimas hojas, y frutas variadas de salutíferos aromas; Lanjarón es en fin la hermosa garganta que eslabona un cuerpo de admirables v voluptuosas formas, con una cabeza soberbia, escultórica, monumental.
Es el enlace del Valle de Lecrín con Sierra Nevada.
Figúrense los poetas un hada que se reclina graciosamente sobre un espléndido lecho de esmeralda, las ondas de su traje están cubiertas de flores, bordadas de cintas de plata, esmaltadas de aljófar y ribeteadas de brillante serpentina;
una faja de blanco armiño, festoneada de mil colores le ciñe la cintura; una diadema de oro y de filigrana, de brillantes y de rubíes corona su frente; una nube azulada y vaporosa envuelve su cuerpo, velándola con la gasa del misterio; del pecho de aquella beldad se exhala un amoroso y lánguido suspiro; su aliento es balsámico como el de los pebeteros; su expresión, voluptuosa como la de una andaluza enamorada, y todo su rostro, todo su ser, derraman un atractivo magnético, un encanto y una felicidad inefables.
Figúrense los curiosos un valle redondeado al que recortan agrestes colinas; una extensa ladera que asciende desde él hasta las alturas de la vertiente meridional de la Sierra. En medio de esta ladera o colina, conocida con el nombre de Bordaila, recortada por dos barrancos, que se desembocan en el Guadalfeo, se extiende la población, cuasi en una sola calle de 750 metros, en dirección E. á O. con una plaza cuadrangular en su centro, edificios regulares y aseados, algunos de ellos de elegante aspecto, con huertos feraces y frondosos jardines, casa consistorial, dos escuelas, iglesia parroquial mediana, dos ermitas, una de San Sebastián y otra de San Roque, en los extremos de la villa, buenas posadas y dos excelentes fondas, tres caminos, uno de ellos carretero, que conduce a Granada, de cuya capital dista 7 leguas, estando en contacto con ella por medio de una diligencia diaria que invierte cuatro horas y media en el tránsito. El pueblo consta de unas 800 casas, que contienen 4.168 habitantes de afable trato y limpio aspecto, siendo su ocupación más general la agricultura, o la industria en la fabricación de pan, vino, aguardiente, jabones, aceite, cintas y lencería.
Figúrense una villa cuya población se duplica en verano, convirtiendo en hospedería la mayor parte de sus viviendas; un pueblo donde se nota extraordinario movimiento, por ser de parada Y tránsito entre la capital y una gran parte de la Alpujarra. Figúrense muchas y ricas fuentes de aguas potables, un terreno muy productivo en aceite, vino, legumbres, cereales, lino, castañas, ricas naranjas y excelentes uvas, monte donde se alimentan multitud de ganados, y en el que abunda la caza de perdices, liebres, conejos y palomas, habiendo también cabras monteses en su término municipal que se extiende una legua de E. á O. y dos de N. a S., confinando con los de Mondújar, Tablate, Ízbor y. Pinos del Valle, pueblos todos del de Lecrín, y- con los de Vélez Benaudalla, Cáñar y Órgiva, a cuyo partido judicial corresponde.
Figúrense una estación balnearia, cuya temporada empieza a primeros de Mayo y termina a últimos de Septiembre, acudiendo en ese tiempo de toda España y aún del extranjero, unos 1.200 bañistas a tomar las famosas aguas de sus siete fuentes medicinales, propias para curar las enfermedades del hígado y del estómago, la clorosis, escrofulismo, linfatismo y anemia. La más abundante de dichas fuentes sirve para baños; es muy ferruginosa V salina. La más fuerte de todas, que se llama Capuchina, tiene en disolución más de once gramos de sales por litro; sus efectos son purgantes, tomadas en gran cantidad, y tónicos si se emplea en cortas dosis. Las aguas de San Antonio y la Capilla son muy ricas en ácido carbónico; contienen hierro en gran cantidad; su sabor es picante y excitan poco el estómago. Se las usa con gran éxito en las gastralgias y dispepsias de los sujetos, cuya sangre se encuentra empobrecida. En las clorosis, anemias y debilidad general orgánica producen una rápida curación.
Las aguas de la Salud, Julia y Gómez, son simplemente gaseosas, y muy a propósito para estómagos delicados. Son de efectos sedantes, muy diuréticas, y sirven para contrarrestar el demasiado estímulo que producen los baños.
Estos son notables por su enérgica acción tónica Y excitante; se toman de muy poca duración, y tienen un prodigioso efecto revulsivo sobre la piel, siendo un poderoso auxiliar en el tratamiento de las dolencias enumeradas.
El establecimiento de baños se halla situado a unos 1.300 metros del pueblo, y los bañistas van a él todas las mañanas en caballerías menores, exponiéndose a su regreso a todas las perniciosas influencias atmosféricas, tanto más perjudiciales, cuando que la temperatura de las aguas es algo termal (29 grados en el baño y 30 en el manantial.)
A pesar de estas malas condiciones higiénicas, a que se encuentra sometido el enfermo, se producen anualmente un número considerable de curaciones, demostrándose así la excelente virtud medicinal de aquellos portentosos veneros.
En la actualidad, la propietaria de las aguas, señora Duquesa de Santoña, tiene adquiridos los terrenos y en su poder los estudios terminados para construir mucho más próximo al pueblo, y con mejores condiciones, un nuevo establecimiento, en el cuál se plantearán todos los adelantos de la hidroterapia, como ya se vienen introduciendo variaciones de importancia en la manera de administrar las aguas, que cada día producen mejores resultados, rompiendo así las prácticas rutinarias que desde antiguos tiempos venían establecidas.
Tal es el Lanjarón de los geógrafos, de los estadistas, de los curiosos y de los hepáticos.
Figúrense por último los demás hombres de ciencia, una pequeña cuenca, cuyas vertientes encuentro clasificadas en el mapa geológico de Drasche por una formación de pizarras arcilloso-talcosas, y rocas calizas, viéndose revestidas de capas de aluvión tanto en sus planos inclinados como en su fondo, constituidos todos en tierra laborable. Corresponden sus terrenos a las variedades secundarias y de transición, ofreciendo sin embargo diferencias en sus componentes de sílice, cal y arcilla; este último principio, y la parte gredosa de la alúmina que se le une, sobresalen en los parajes inmediatos al barranco Salado, donde la capa vegetal es menos productiva, y en los demás, que están menos cargados de arcilla, crecen las plantas mucho más vigorosamente.
El clima de esta zona es benigno, oscilando la temperatura entre los 6 y 30 grados centígrados, como mínima y máxima a la sombra, en las dos estaciones extremas.
En su reducido término se notan tanto las variadísimas Y ricas producciones de los climas intertropicales, como la de los templados y fríos, observándose escalonadas gradualmente todas las regiones de cultivo; pues mientras en el fondo del valle se crían las chumberas, pitas y plátanos, plantas de los países más cálidos, se ven más arriba los naranjos y limoneros, los olivos, las vides y los cereales, siguiendo en ascendente progresión, los granados, fresnos, higueras v morales, después los cerezos \, los castaños, más arriba las plantas alpinas como los tejos, boj, aceres, alisos, salvia, ajenjo, mejorana y manzanilla, después pequeños robles y* encinas, y sobre ellos tal o cuál planta de sauce herbáceo, do sabinas y líquenes, pertenecientes a las regiones hiperbóreas, como en las desnudas crestas de la Laponia, de Spitzberg o de la Groenlandia.
Reprodúcense con el mayor vigor y lozanía en este vergel universal todas las demás semillas, flores y frutales de las tres zonas, siendo un verdadero fenómeno de la naturaleza, el encontrar, como allí, unidas las plantas espontáneas de la tórrida con las endebles que se ocultan entre las piedras azotadas por el helado soplo del Boreas.
Hay también en su término excelentes canteras, de donde se han sacado preciosos mármoles, que enriquecen muchos de los templos de España, masas enormes de cuarzo y seletina, abundante alabastro, variedad de matizados jaspes, y en especial el verde, cuya cantera más renombrada aparece en el barranco de San Juan.- A. R.
Lanjarón vista aérea de 1930
Muy señor mío y de mi aprecio: Con el objeto de dar fiel cumplimiento al compromiso que tengo contraído de tener a los lectores de su apreciable periódico al corriente de lo que en este pueblo ocurre, paso a manifestarle lo que sigue:
Desde el mes de Febrero último se está trabajando en la construcción de un balneario, sito, por cima de la Fuente de la Salud, el cual estará concluido para primero de junio próximo, principio de la temporada de baños. Se proyecta reunir las fuentes Capilla y Gómez en el local de las fuentes Salud v San Antonio. El proyecto estaría muy bien siempre que se llevara a cabo por medio de tuberías emporcelanadas por dentro, pues en caso de no ser así, perderían muchos grados a causa de la enorme distancia que separa a las fuentes referidas.
Muy pronto darán comienzo los trabajos para la construcción de un Hotel, situado a la entrada del pueblo. A espaldas de dicho Hotel se edificará un Hospital para los pobres, asistido por Hermanas de la Caridad. También se proyecta la formación de una escuela de párvulos.
Han llegado a esta villa los señores que van a construir una fábrica de luz eléctrica, quedando satisfechos de las buenas cualidades de los saltos de agua, y según me dicen, en breve principiarán los trabajos a los se trata de imprimir gran actividad para que a fin de Mayo se encuentre terminada la fábrica y hechas las instalaciones en la población. A la vez varios señores han formado otra compañía con idéntico objeto por lo cual hemos de disfrutar de las ventajas que la competencia origina. Esta última compañía se propone no solamente dar luz a esta villa, sino a la de Órgiva.
El día 9 de junio tendremos una gran función de teatro a beneficio de los pobres de esta población. Los actores serán varios jóvenes de ambos sexos, pertenecientes a la buena sociedad de este pueblo. Las obras que han de representar son las tituladas ¡Viva el pueblo! La explosión del Maine y el Senado Yankée, todas ellas de D. Marcelino Flores, y se pondrán en escena en los salones árabes de dicho señor.
Sin otra cosa por hoy que comunicarle, queda suyo afectísimo y seguro servidor q.b.s.m.
El corresponsal
Balneario de Lanjarón 1915
Inauguración de la ermita en el Cerro de la Cruz - 1902
En la exposición internacional de alimentación e de higiene que actualmente se celebra en París han obtenido diploma de medalla de oro los señores Rodríguez Benavides y Compañía, por las muestras de agua de Lanjarón que han enviado a dicho concurso internacional.
Nos alegramos mucho de que el mérito de que estas famosas aguas granadinas haya sido reconocido en tan importante exposición.
Inauguración de la fábrica de luz eléctrica.
Xxx xxxxxxxxx xx xxxxxxxx, que en su carrera progresiva van implantándose no ya en ciudades, sino en los más pequeños pueblos y villas proporcionando inmensas ventajas se ven también en esta villa, última del valle de Lecrín.
Al poco tiempo de la inauguración del Colegio de Madres, bendita institución llevada a término feliz por una humilde monja, se inaugura y bendice la fábrica de luz eléctrica.
A las dos de la tarde del 17 del actual una numerosa y distinguida comitiva presidida por D. Pedro Feizas, dirigióse a la energía eléctrica, que se halla instalada en la estribación final de Sierra Nevada y próxima al río que lleva el mismo nombre de la villa.
El párroco D. José Puertas bendijo la imagen de la Virgen, bajo cuya advocación se ha erigido el bonito edificio, bendiciendo igualmente con las solemnidades de rúbrica todas las máquinas y aparatos.
D. Pedro Feizas obsequió espléndidamente a los numerosos convidados, en el Hotel San Roque, donde se sirvió un banquete.
La belleza femenina estuvo representada por las bellísimas señoritas de Feizas, Sánchez Moreno, Dolores Montero, Trinidad Movano, Pilar \- Dolores Collantes, Carmen y Rufina Pajes, Carmen Hernández, Joaquina Mérida, Dolores Hernández, Tránsito Puertas y Joaquinita Banqueri, y las señoras de Jaraba, Victoria, Rioja ) Pura Movano.
Entre los caballeros se encontraban los Sres. Ernesto Aguilar, Enrique Montero, Collantes (Cayetano y Luís), Sánchez Moreno, Miguel Lozano, Hernández (Miguel), Rioja Rubio (Antonio) y los señores Rioja, Montero (D. José), Victoria (D. Emilio), Puertas (D. Enrique) y otros más que siento no recordar.
Higinio CALVENTE
Lanjarón 17 febrero 1901.
Lanjarón. Hotel Victoria. 1925
En el tajo llamado de la Cruz y que tomó ese nombre por una que se alza allí, no muy lejos del pueblo de Lanjarón, acaba de inaugurarse una ermita, cuyas obras han sido costeadas por suscripción pública que organizó D. José Lozano Pinar.
Adornan las paredes de la ermita varios cuadros de asunto religioso, que fueron regalados por la señora doña Antonia Fernández, viuda de Tuset. Los Sres. D. Francisco Martínez y D. Francisco Gutiérrez Jaraba, ambos naturales de Lanjarón, solicitaron del Sr. Arzobispo, a instancia de Piñar, la oportuna licencia para decir Misa en la ermita, licencia que fue concedida. La primera Misa se dijo el domingo, y el suceso se celebró con toda solemnidad.
A las siete de la mañana la banda de música que dirige D. Justo Collantes, recorrió las calles de la población, seguida de una nutrida muchedumbre, dirigiéndose luego a la nueva ermita.
Hizo la bendición de ésta el párroco D. José de Puertas Bueno, acompañándole los señores D. Juan Cuenca y D. Miguel Mingorance y, el Sacristán D. Antonio Sánchez, y terminada la ceremonia, se cantó la primera Misa, por el mencionado párroco.
Después hubo un espléndido refresco.
En la concurrencia se hallaban, entre otras personas, las Srtas. Pilar Pérez, Dolores Díaz y Soledad Domínguez, de Órgiva; Expiración Rodríguez, de Cáñar; Dª María López Ruiz y su hermana Paca, señorita Carmen Molina, de Dúrcal; Sor Clementina y todas las alumnas del Colegio de estas, Da Antonia Fiestas con sus sobrinas las Srtas. Pilar v Concha, señorita Tránsito Puerta, Elisa Bueno, Dolores Hernández, Joaquina Hernández, María Lozano Samos, Antonia Lozano Samos y las señoras doña Joaquina Banqueri, doña Carmen Puertas, doña Eloisa Collantes, doña Resurrección López, doña Francisca Ruiz, doña Filomena Hernández y los Sres. D. Cayetano Collantes, D. Benito Alonso, D. Rafael López, D. José Domingo, D. Juan Hernández Cobo y el primer teniente de Alcalde D. Enrique Puertas Bueno.
La ermita fue muy visitada durante todo el día.
La nueva iglesia se halla enclavada en un sitio muy pintoresco.
Lanjarón. Fuente de los cuatro Chorros 1915
La cosecha de aceite ha sido excelente, como hace muchos años no se ha conocido, tanto por la abundancia como por la calidad del producto. Se cotiza de 35 á 36 reales arroba en los molinos. Estos continúan abiertos, pues aún no ha terminado la recolección de la aceituna.
Las campos en general presentan buen aspecto, por más que no deja de notarse la falta de lluvias en el presente mes. Se espera buena cosecha de trigo, y los árboles prometen también mucha y buena fruta. En cambio los habares no están más que regular en la vega, y completamente perdidos en otros parajes a causa de los extemporáneos fríos del pasado mes.
Se ha hecho en estos últimos días una buena reparación en las cañerías que conducen el agua potable y se han colocado dos nuevas fuentes en sitios muy, adecuados y cómodos para el servicio público. Con este motivo el señor alcalde recibe muchos plácemes, demostrándole todos las simpatías con que lo ven al frente del gobierno y administración de esta importante villa. Parece que no serán éstas las últimas mejoras que hará este señor alcalde, pues convencido como está del aprecio que se le tiene y del respeto con que se le atiende y considera, es seguro corresponderá llevando a cabo otras obras de reconocida utilidad para este pueblo, particularmente en aquellas cosas que miran a la higiene y tanto importan a la salud pública.
Es un verdadero conflicto lo que ocurre en esta villa con el cambio de la moneda. Desde el primer día que comenzó el plazo para canjear los duros sevillanos, nadie quiere recibir monedas de cinco pesetas, hasta el punto que en el comercio es más fácil comprar o vender al crédito que en duros contantes y sonantes. Esto está muy bien para las personas que gozan de crédito, pero los infelices que no tienen más garantía que la de la moneda que muestran de presente, no encuentran quien les venda lo más preciso siquiera para comer.
El público creía que en los estancos encontraría cambio, y a ellos acude en demanda de calderilla y, plata menuda. Pero aunque los estanqueros han recibido orden de cambiar, no tienen fondos para tantas exigencias, y por consiguiente es perfectamente inútil mandarles que cambien si no se les manda dinero. El señor Alcalde queriendo prevenir los males que de esto pueden originarse, ha telegrafiado al señor Gobernador, el que ha contestado que acudan al Banco de España en busca del remedio. Así se ha hecho saber hoy a este pueblo por medio de pregón.
Para los que tienen mucho que cambiar, esto no ofrece inconvenientes, quizás les será hasta agradable pasarse unos días en la capital, reduciendo todos sus cuidados a una tranquila ociosidad, y esperar unas pocas horas charlando en el patio del Banco en tanto les llega el turno.
Los trabajos son para los desgraciados que tienen pocas monedas, que viven al día con el producto de sus jornales, de humildes oficios o de pequeñas industrias. Estos, como siempre, son los explotados. No pueden ir a la capital a cambiar un duro, dos o tres, o seis ú ocho, que es lo más que pueden tener, y se ven obligados a utilizar los servicios de especuladores que cambian los duros a diez y ocho reales.
Esto es injusto y cruel, y no debe consentirse. El Gobierno debió preverlo, y ha debido evitarlo, siendo a mi juicio cosa tan fácil, que con sólo un plazo más largo para cambiar, en vez del angustioso de quince días, creo que se hubieran evitado los males que ya lamentados.- El corresponsal.
Lanjarón. Paraje del castaño Gordo 1910
Desde Órgiva
Para las siete de la noche del martes de la presente semana, estaba acordada la inauguración de un nuevo círculo en el vecino pueblo de Lanjarón, que llevaría el lema de: «Círculo Católico de Labradores,» bajo la advocación y patronato del Patriarca San José.
Atentamente invitados por mi buen amigo el joven estudiante D. Cayetano Hernández Díaz, para asistir al acto inaugural, nos trasladamos a dicho pueblo el médico de ésta ciudad D. Rafael Ramírez Rivas y el que esto firma.
Al llegar a Lanjarón, notamos un movimiento más grande que de ordinario; en su larga calle Real y afluyentes, menudeaban los corrillos de hombres, vestidos en traje de día de gala, y al pasar junto a ellos, podía observar el transeúnte, si se fijaba un poco, que el tema de la conversación en todos era el mismo: la inauguración del Círculo Católico.
Acompañados de los Sres. Díaz Patricio y D. Enrique Hernández Bueno, a quien fui presentado, me dirigí al domicilio social de la nueva Asociación, situado en la parte más céntrico del pueblo, en la plaza.
Es aquel un amplísimo edificio, de construcción antigua pero con grandes salones a propósito para el fin a que en la actualidad se le ha destinado. Sobre la puerta de entrada lucen dos potentes lámparas eléctricas; algunos metros antes de llegar a aquella, se apretuja inmensa muchedumbre de gente del pueblo ansiosa de ver una cosa para ella nueva.
Consigo franquear aquella barrera humana y penetro en un amplio portal, para pasar después al patio principal de la casa.
En uno de sus laterales pende de la pared un hermoso cuadro con la imagen de San José. Una modesta mesa y varias sillas componen el estrado que ha de ocupar la presidencia.
La escalera, corredores y balcones del piso principal aparecen materialmente llenos de concurrentes. Recorro los salones: todos están amueblados modestísimamente; en uno de ellos veo varios mapas y cuadros explicativos de Geografía Física y Astronómica.
La banda de música, dirigida por don justo Collantes Bueno, ejecuta en el patio escogidas composiciones.
Poco después de las siete llegan los señores que componen la junta directiva: Presidente, D. José Puertas Bueno, cura párroco, D. Cayetano Collantes Bueno; tesorero, D. Miguel Mingorance, teniente cura; secretario, D. Patricio Hernández; vice-secretario, D. Ramón Benticuaga Díaz; vocales, D. Eduardo Puertas Bueno, D. Rafael Lozano Gallegos, don Juan Ruiz Álvarez, D. Diego Salaverri y D. José Gutiérrez López.
El señor cura ocupa la presidencia y los demás señores de la junta sus puestos. A la derecha del presidente, toma asiento el alcalde de Lanjarón, D. José Lozano.
Declarada abierta la sesión inaugural, toma la palabra el dignísimo cura párroco Sr. Puertas Bueno, haciéndose entre los concurrentes un silencio sepulcral. <No es este círculo que se acaba de inaugurar, comienza diciendo el señor Puertas, un centro político como intencionada y maliciosamente han propalado por el pueblo algunos elementos mal avenidos con el bienestar y la prosperidad de Lanjarón. Y os demostraré que aquí no se viene a hacer política, el que yo, humilde ministro del Señor, esté al frente de este circulo que se llamará <Católico de Labradores>, nunca he sido liberal, conservador, ni carlista; hijo soy de este pueblo y lo mismo cuando he estado al lado vuestro, que en mis ausencias, sabéis que mi único anhelo ha sido velar y, procurar por el bienestar de mis paisanos>.
<La creación de este círculo ha sido idea sola N° exclusivamente mía y su realización se debe a distinguidas personas que conocedoras de mis propósitos me han secundado noble y desinteresadamente>.
<¿Qué fines nos hemos propuesto al crear esta asociación? Voy a decíroslo: el bien moral y material, la unión del obrero y* el labrador distanciados hasta hoy por sus posiciones sociales; que bajo un mismo techo, en un mismo salón, en una misma mesa, puedan estar juntos el rico v el pobre, el señorito y el hombre del campo; en una palabra, la igualdad, que predicó Jesucristo <Instrucción del obrero y del labrador, creando para el primero escuelas nocturnas, proporcionando al segundo cuantas obras v revistas de agricultura puedan serles útiles y dando para todos conferencias que le ilustren en todos los ramos que puedan afectar a su engrandecimientos >
<Los pueblos modernos van a la conquista de lo desconocido, no con las armas, sino con el conocimiento de las Ciencias y las Artes, vosotros debéis aspirar a salir del ostracismo en que venís viviendo, una vida rutinaria y mísera, aspiración noble y justa de todo pueblo que se cree fuerte y capaz, y esto solo podéis conseguirlo ilustrándoos, conociendo vuestros derechos y vuestros deberes, única manera de haceros respetar v no incurrir en extralimitaciones >
<¿Cómo podréis querer hacer guardar y respetar vuestros derechos si no los conocéis?>
Una atronadora salva de aplausos ahoga las últimas palabras del Sr. Puertas.
<Nos proponemos también arrancaron de la taberna, auxiliaros en vuestras enfermedades y en una palabra ayudaros material y moralmente y en todos los infortunios >
<Os dije al principio que en este círculo no se haría política, pero también os digo ahora, que en él velaremos todos para evitar los desafueros del caciquismo que es la plaga mayor que puede azotar a los pueblos >
<Política no; pero sí defensa de los intereses y derechos de la masa común >
<¿Y cómo se consigue esto? Asociándose, aunando voluntades, siendo todos uno solo para conseguir el bienestar particular y general› <Coged un solo cabello y pronto le arrancaréis y destrozaréis; pero coged una docena de ellos y os será más difícil conseguirlo >
<Debo deciros para terminar, que todo esto hemos de conseguirlo a base de la Religión y lo conseguiremos, porque en este mi pueblo y el vuestro todos sois católicos y amantísimos de las sabias y saludables doctrinas de Nuestro Señor Jesucristo >
<Yo pido al Patriarca San José que a todos os ilumine haciéndoos conocer la nueva era de progreso que os brindamos y a mí me inspire en el cargo que me han confiado para llevarla a feliz término >
Estos fueron los párrafos más salientes del discurso del dignísimo señor cura párroco.
Después hizo uso de la palabra el joven abogado v vicepresidente D. Cavetano Collantes Bueno, el cual en un discurso magistralmente hecho (y que sentimos no poder publicar íntegro, como nos lo remite nuestro colaborador, por el exceso de original), demostró la necesidad de la asociación del hombre para alcanzar y conseguir grandes empresas no reconociendo la diferencia de clases sociales, pues <si los Apóstoles de Jesucristo, dice el orador, eran míseros pescadores y conquistaron el mundo entero, con la predicación de las doctrinas del Divino Maestro, ¿por qué nosotros no hemos de llegar a conquistaron a vosotros en buen vuestro para que lleguéis a ser hombres de provecho y ciudadanos aptos?
El Sr. Collantes, cuyo hermoso y brillante discurso aplaudió la concurrencia, fue muy felicitado al terminar.
Sería imposible consignar los nombres de todos los concurrentes al acto, que resultó soberbio, superando a cuanto los organizadores podían imaginarse.
No podía faltar la representación del bello sexo, y, allí estaban las señoritas Conchita Fiestas Rodríguez, Rosa y Dolores Collantes Bueno, Encarnación Puertas Bueno, Dolores y María Lozano Samos y la señorita Antonia Fiestas, a las que fui presentado por el joven señor Hernández, que asistió al acto en representación de su señor padre el abogado don Cayetano Hernández Bueno.
Los invitados y concurrentes fuimos obsequiados con dulces y anís.
Merece párrafo aparte la Filarmónica, compuesta hasta ahora por los señores siguientes socios del Círculo: D. Manuel Manzano, don Luís Collantes Bueno, don Antonio Collantes Hernández, don Ramón Benticuaga, don José González v don Cristóbal Lozano, los cuales con gran maestría y arte ejecutaron delicadas compasiones de los más reputados autores, siendo justamente aplaudidos. Después de la once de la noche, comenzó el desfile, y el que esto escribe, montó en la grupa de la caballería que a Lanjarón le condujera, dispuesto a aguantar con paciencia el fuerte aguacero que caía y a que no se le borraran de la imaginación las caras tan bonitas que pudo contemplar en los momentos de descanso que le permitía la misión que allí le llevó.
J. Álvarez Castilla
Órgiva, 12-12-908
Balneario de Lanjarón 1930
Sr. Director de EL TRIUNFO.
Distinguido señor v especial amigo: Espero de su reconocida bondad se publique en su ilustrado periódico la siguiente reseña.
Fausto día y recibimiento magnífico. Lo ha sido para Lanjarón, con motivo de la llegada de las Hijas de la Caridad, a donde vienen para la inauguración del colegio que han de establecer.
Preparativos. El día espléndido, impropio del invierno, ha favorecido mucho el recibimiento de las Madres.
Verdadero día de primavera, pues los rayos solares que han brillado con toda su fuerza, caldeaban como si estuviésemos en Mayo.
Así es, que aprovechando los lanjaronenses la placidez del tiempo, llenaron bien pronto las plazas, las calles y el paseo todo de la renombrada Fuente de la Salud, para dar la bienvenida a las Hijas de tan venerable instituto.
En la casa Ayuntamiento, en donde se reunieron las autoridades y la música, en la Iglesia parroquial, en donde se reunió el Clero, en las calles, en donde los grupos que se formaban junto a los citados edificios, y en los rostros mismos de los paseantes, que impacientes esperaban la hora deseada de ponerse en marcha, las risas y alborotos de los niños, todo presentaba un conjunto hermoso, una nota llena de color, de vida v de júbilo.
En marcha. A la una y veinte minutos púsose en marcha la comitiva, saliendo de la casa ayuntamiento las autoridades, que precedidas de la banda de música de esta población y ondeando a su frente una preciosa bandera que en su centro se leía la siguiente inscripción: Vivan los fundadores y la comunidad, vivan; y al sonoro compás de un paso doble, convidaban al vecindario entero a que tomase parte en tan justa y digna alegría.
A su paso por la puerta de la Iglesia parroquial, se incorporó el Clero, mayordomos de las Hermandades, )T en todo su curso, un gentío inmenso que hacía imposible el paso por las calles.
Llegada a la Fuente de la Salud. Aquí el entusiasmo rayaba en delirio; hermosísimo aspecto presentaba entonces la amplia y preciosa explanada de la fuente, en donde, bajo los soberbios techados de madera riquísima y de elegante dibujo, tomaron asiento todo el elemento oficial y las personas más distinguidas de la población. Aquí, y en espera de la llegada de la diligencia, la música amenizó el acto, tocando escogidas piezas de su repertorio.
Llegada de la diligencia. A la evidencia y certeza de ésta, todo el gentío tomó por asalto la carretera, deseosos todos ser los primeros en saludar a las expedicionarias.
En marcha. Cambiados los saludos afectuosos, la comitiva, formada por unas tres mil personas, se dirigieron a la Iglesia parroquial. Al entrar en la población, todas las descripciones que se hagan, por elocuentes que sean, resultan pálidas, y no son, ni siquiera, un reflejo de la realidad.
El regocijo, la alegría y entusiasmo es indescriptible. La calle era incapaz de acoger tan apiñada multitud.
Al tañido de las campanas, el crujido continuo de la nube de cohetes que llenaba el espacio, los vivas y los saludos que desde los balcones daban a los recién llegados, y la alegría, el regocijo y el entusiasmo, hacían derramar lágrimas de consuelo, de placer y de felicidad.
En la Iglesia parroquial. A la puerta de ésta esperaba a los expedicionarios, para ofrecer el agua bendita, el dignísimo Párroco D. José de Puerta Bueno, a cuyo preclaro entender, táctica y grande celo por todo aquello que redunda en gloria de Dios, se debe principalmente este recibimiento, dignísimo en verdad, dispensado hoy a las Madres de la Caridad y demás acompañantes. ¡Qué mejor testimonio, ni qué mayor gloria para un Párroco, que tan cumplidamente llena todos sus deberes, que la gratitud inmensa de sus hijos!.
Después de tomada agua bendita, las hermanitas ocuparon los asientos que tenían preparados en el Presbiterio, en seguida empezó el acto religioso, comenzando con la exposición del Santísimo, la estación y a continuación ocupó la Sagrada cátedra el Sr. Caro, párroco de Santafé, que en extremo emocionado ante acto tan solemne y sublime, en un elocuente discurso, demostró la misión especial de las Hijas de la Caridad e hizo la presentación de ella al Clero, a las autoridades y al pueblo en general.
A seguida se entonó el Te Deum y se concluyó con la bendición y reserva de S.D.M., pasando después los convidados a la casa fundación o residencia, en donde fueron obsequiados con un espléndido lunch.
Quiera el cielo colmar de bendiciones esta fundación, que tan buenos resultados y tan óptimos frutos ha de dar a esta población.
El corresponsal
Lanjarón y Enero 26-900.
Balneario de Lanjarón. Fuente de la Salud. 1910
El Colegio de la Santísima Trinidad
Quien haya visto la más bella de las estribaciones del Sur de Sierra Nevada, coronada en su cumbre por blanco nimbo de perpetuas nieves, que festonean la inmensa alfombra de nogales y castaños; quien haya respirado los purísimos aires, saturados del azahar de sus verdes naranjales, y escuchado el rumor de las abundantes cristalinas aguas que, alegres se deslizan por acequias y brazales, comprenderá todo el acierto de la feliz idea de levantar un colegio en tan delicioso paraje.
Quien haya contemplado lo esbelto del edificio, la amplitud de sus salas, la elegante pulcritud con que está decorado, la comodidad, la higiene y bienestar que en él se encuentran, alabará la discreción con que se ha sabido realizar idea tan acertada. Y quien sepa la generosidad inagotable con que la fe de unos padres, tan ricos como piadosos, ponen sus riquezas al servicio de la caridad de una hija, que cifra su mayor gloria en serlo de San Vicente de Paul, no se extrañará de que la fama de este colegio haya traído a éste rincón de la Alpujarra alumnas de Cádiz, Sevilla, Málaga y Badajoz, sin contar otras muchas de la capital y provincia de Granada.
Con cuatro actos brillantísimos ha justificado este colegio lo merecido de su fama.
Los reseñaremos brevemente.
Los exámenes de fin de curso, verificados en los últimos días de Junio, por su extensión y profundidad, demuestran elocuentemente que el que es incomparable Sanatorio por sus aires de Sierra, aguas medicinales y posición topográfica, es además un notable colegio cuy °a educación literaria promete hacer de sus alumnas, no la mujer sabia que horripilada a De Maestre, pero sí la mujer instruida que, al intervenir en una conversación de Gramática, Aritmética, de Religión o Historia, sepa algo más que hacer un gracioso gesto que, no por dibujarse en una cara bonita, dejara de pregonar su lamentable ignorancia.
Las muchas y preciosas labores que han lucido varios días en la Exposición Artística, acusan un vigor físico que solo se encuentra en esta privilegiada tierra, y una asiduidad incansable, debida, sin duda, al celo de las maestras y al sólido espíritu de piedad que no permite desperdiciar un momento de tiempo. Solo así se explica la gran labor que acusan los delicados bordados artísticos en blanco, los magníficos edredones, los preciosos cojines pintados y bordados, los elegantes veletes, los cuadros pintados al óleo, las placas de porcelana, las preciosas cestas de flores y plantas artificiales que pudimos admirar juntamente con las mantelerías, vestidos y otras muchas prendas cortadas y confeccionadas por las mismas alumnas.
La solemne velada literario-musical del 29 de junio, fue algo más que un legítimo alarde de la educación musical que reciben las alumnas; fue un acabado ejemplar de buena declamación y pronunciación correcta, así como también del modesto desenfado con que se presentan en público, ni encogidas ni altivas, ni desdeñosas ni turbadas, sino serenas, atentas, distinguidas.
Pasemos por alto los delicados números de esta primera velada; callemos los nombres de las precoces artistas y vengamos a la otra velada de distribución de premios.
Atraídos por el grato recuerdo de otros años y por lo agradable de los números del programa, a las doce del día 30, hallábanse reunidos en la amplia sala dedicada a estos actos, los padres de algunas alumnas, lo más selecto de la colonia de bañistas y lo más distinguido del pueblo.
El elegante estrado presidencial, ocupado por la señora superiora y varias personas de gran respeto, fue presidido por el señor don José de Vides, dignísimo párroco de San Miguel, de Jerez.
Después de un precioso canto, oportunísimo, tierno y afinado, la señorita María Sánchez Tuset, subió al estrado y con mucha soltura y pronunciación correctísima, llevó un discurso en francés, alusivo al acto, que mereció los sinceros aplausos de los inteligentes, vivamente satisfechos al ver la corrección y propiedad con que las alumnas aprenden esa lengua.
Las señoritas Inés Pérez y María Carrillo Rosales se portaron como maestras en la ópera Reymond.
En la poesía Las dos rosas arrancó lágrimas la pequeña niña María Luisa Puchol. La canción mi patria Sevilla, por la niña Angustias Tuset, hirió fibras muy delicadas del corazón. En la Tarantela a dos pianos estuvieron magistrales las señoritas Carolina Pérez y María Carrillo Rosales.
Llegó muy al alma el tierno zorzico Mi casita blanca, cantado por la niña María Luisa Puchol. Declamaron muy bien la poesía Los dos ciegos las niñas Esperancita Molina y Adoración Cuenca. La señorita Magdalena Robles lució sus conocimientos musicales y bonita voz en el canto La partida del colegio, y después de un soberbio paso doble tocado de mano maestra por la señorita Carolina Pérez se hizo la siguiente distribución de premios:
Banda de mérito: las señoritas María Sánchez Tuset, Inés Pérez y María Carrillo Rosales.
Banda de piedad: la señorita María Luisa de la Torre.
Banda de aplicación: las señoritas Soledad Godoy Pepita Martín, Esperanza Molina, Camila de la Torre, María Carrillo González y Conchita Conde. Banda de conducta: las señoritas Magdalena Robles y Carmen Murillo. Obtuvieron diploma las señoritas María Luisa Conde, Paquita Molina, Magdalena Gallardo, Angustias Tuset, Emilia Gallardo, María Mesa, Adoración Cuenca, María Luisa Puchol, Encarnación Carrillo, María Luisa Murillo, Aurora Conde, Salud del Saz, Carmen Hernández, Dolores Hernández, Matilde Robles y María Carrillo Pacheco.
Obtuvieron libro las señoritas Antoñita Carrillo v María Ramos. Terminó el acto con un discurso del Sr. Vides, verdadera filigrana del buen decir, en el que expresó con elocuente gallardía delicados pensamientos sobre la educación de la niñez, haciendo gala de conocer muy bien la moderna cuestión del feminismo, acabando con un sentido pláceme a las alumnas y un testimonio de admiración y aplauso a las humildes Hijas de San Vicente que con tanta caridad y celo discretísimo, trabajando por la instrucción y robustez de las alumnas, cooperan eficazmente a la regeneración física, intelectual y moral de nuestra patria.
Un bañista