Según los mapas de 1931, Ízbor se comunicaba con Motril por la ladera derecha del río hasta llegar a los Acebuches, donde se juntaba con la N. 323; y dirección contraria hacia Pinos. Ambas direcciones eran caminos de herradura, como siguen siendo aún hoy en día.
Según nos cuentan en Ízbor, la carretera que rondando los 70 los unió con la N. 323 en la parte frontal del pueblo, se hizo gracias a un alcalde de entonces, que mandó construirla, "a sabiduría personal", mandó una máquina, y una vereda que los vecinos utilizaban para subir hasta la citada carretera, la convirtió en su nuevo acceso para vehículos a cuatro ruedas. Luego se asfaltó y se convirtió en carretera local
Con la construcción del Pantano se trazaron nuevas vías de acceso a la zona, una de las cuales terminó asfaltándose (últimos años del XX), convirtiéndose en la nueva entrada al pueblo, a través del marquen izquierdo del Río, abandonándose la anterior salida por el mal trazado y fuerte desnivel que presentaba