Yacimientos antiguos
- Los asentamientos humanos en la zona son muy antiguos, debido al reclamo
de la Laguna. En la Cueva de los Ojos encontramos un hábitat
estacional o cazadero de temporada, correspondiente al Neolítico con
restos de hueso de cabra, ciervo y jabalí junto a puntas de flecha, restos
de adorno en concha y fragmentos de pintura ocre.
- De la cueva de los Ojos (Toio y Almohalla 1985) se recuperó una
colección lítica donde sobresale
- el grupo solutrense con puntas de cara plana,
- una punta de pedúnculo y aletas esbozadas
- y hojas de laurel, en definitiva un claro Solutrense superior (siempre
atendiendo al utillaje tipico).
- Es muy interesante la sepultura romana de tégulas a doble
vertiente, que apareció en Cortijo Hundido con un solo cadáver. Como
ajuar presentaba un collar de unas 30 cuentas muy variadas, de azabache,
ámbar, piedra verde, una cuenta tubular de plata... Las de azabache tenían
una decoración de círculos y líneas incisas. Junto a los pies se halló la
planta de una sandalia de cuero enrollada sobre sí misma, que conservaba las
tachuelas de hierro en el borde. junto al brazo izquierdo aparecieron 24
anillos (en plata, cobre, bronce y oro) ensartados en una pulsera de bronce
en forma de cinta con el crismón en relieve repetido numerosas veces.
También dos pulseras más, una de sección circular y la otra, al parecer, de
las regulables. Los anillos de plata estaban ensanchados por el centro
formando un espacio cuadrangular. Uno de los anillos era de oro y con una
cuenta de perla. Dos apliques de cinturón filiformes trenzados completan el
ajuar.
Después han aparecido al menos seis tumbas más, formando dos filas de
tres, alineadas longitudinalmente, orientadas con la cabeza al suroeste.
También eran de tégulas colocadas a doble vertiente.
Sacado de la Guía de Ideal sobre el Valle
de Lecrín