Sacado de "Catálogo-inventario histórico de los puentes de Andalucía. Provincia de Granada". 1985
Es un trabajo realizado por el Ministerio de Obras Públicas y Urbanismo y de la Junta de Andalucía para intentar de hacer un catálogo de los diferentes puentes de Andalucía. Se realizó en 1985. Por lo que está rondando los 30 años. E intentaba buscar los elementos históricos, por lo que incluía sólo los construidos antes de 1936
Hemos sacado los datos correspondientes a nuestra comarca y algunos de Granada capital. Aquí salen datos de puentes menores difíciles de encontrar en otros sitios
Cualquiera que haya recorrido esta carretera y haya tenido la curiosidad de irse fijando en sus obras de paso, movimientos de tierras, trazado, etc., comprenderá por qué puede considerarse la de mayor envergadura que acometió la provincia en el siglo pasado. Añádase a esto la turbulencia política de la época, cuajada de enfrentamientos civiles, y se explicará la larga historia de esta carretera que comienza en - 1830 y en 1917 aún tenía obras en construcción.
Su trazado, siguiendo la dirección Norte-Sur, parte de Granada en dirección al Valle de Lecrín y a partir de ahí discurre pegada a la falda occidental de Sierra Nevada por parajes de impresionante belleza paisajística, hasta Motril. Actualmente se ha construido una variante que se separa del antiguo trazado justo en el puente sobre el río Guadalfeo, unos tres kilómetros al Norte de Vélez de Benaudalla. La nueva carretera va pegada al río Guadalfeo hasta su enlace con la N-340.
Los puentes catalogados en esta carretera son:
Para dar una idea de la importancia de estos puentes digamos que dos de ellos: Isbor y Tablate, los hemos incluido en el listado de puentes sobresalientes de la provincia y que los de Dúrcal , Tablate, Isbor y Guadalfeo fueron presenta dos, como muestra del buen hacer de la ingeniería española, en la Exposición Universal de París de 1878. Anterior a la de la Torre Eiffel de 1889
El 30 de junio de 1878, la cabeza de la Estatua de la Libertad fue mostrada en
el jardín del palacio del Trocadero, mientras otras piezas fueron enseñadas en
los Campos de Marte
Otras obras importantes de esta carretera son sus des túneles, las grandes trincheras antes y después del puente de Tablate y la gran cantidad de pontones primorosamente ejecutados que jalonan el itinerario. Respecto de los pontones llamamos la atención sobre los muchos que existen de fábrica mixta de ladrillo y sillería, similares a los de Talará y al de Rambla de Escalate, cuyo distintivo principal es la boquilla de sillería en diente de sierra y tímpanos de ladrillo.
Hecho este breve preámbulo, veamos cuáles fueron los antecedentes y los hitos principales de la historia de esta - carretera :
Digamos en primer lugar, que la ruta Granada-Motril no empieza a aparecer en la literatura sobre caminaría, itinerarios, etc. hasta bien entrado el siglo XIX. En el itinerario de postas de Cabanes sólo aparece como conducción transversal para transportar la correspondencia. En la "Carte Itineraire D'Espagne", de 1838 aparece como camino para peatones. De ello deducimos su escasa importancia como ruta tradicional. Entonces, ¿por qué se acomete tan ardua empresa? Los escritos de la época la justifican por la necesidad de dar a Granada una salida directa y rápida al mar.
Fue hacia 1830 cuando comenzaron los trabajos de la carretera Granada-Motril "debido al celo del Excmo. señor con de de Montijo". En 1831 D. Elias Aquino, inspector del Cuerpo de Caminos, presupuestó las obras quedando adjudicadas las mismas a D. José Casals y Remisa. "Se le auxiliaba con un fuerte presidio y con las sumas que producían los arbitrios impuestos a las provincias de Jaén, Granada, Málaga y Córdoba". Esta contrata se anuló sin que se hubiese hecho nada en la carretera.
El 3 de abril de 1839 comenzaron las obras en el cerro del Suspiro del Moro "que se emprendieron con un presidio de 1060 confinados, contando además con los rendimientos de los arbitrios sobre los vinos y aguardientes que entrasen para el consumo de esta ciudad, y con el recargo de un cuarto en el porte de cada carta". El 3 de septiembre del mismo año se suspendieron las obras ante la falta de recursos económicos, ya que la guerra civil absorbía los productos íntegros de los arbitrios.
En 1841 tomó posesión de su nuevo cargo el ingeniero D. Nicolás de Contreras. Pese a sus denodados esfuerzos por llevar a buen término las obras encontró los mismos problemas que su antecesor: falta de recursos. Por esta razón las obras se iniciaban y paralizaban continuamente con la consiguiente desmoralización de los municipios afectados que veían "que bajo el nombre de carretera de Motril se hacían repartimientos a los pueblos, que no se invertían en sus obras", por lo cual surgió el malestar entre los que tenían que pagar las derramas.
En este estado se permanece hasta 1850, año en el que se reactivan las obras, gracias al aporte económico del gobierno y de la provincia.
En 1851 se comienzan las obras de fábrica por los contratistas, que las llevan con lentitud.
En la memoria de obras publicadas de 1886 se da noticia de que ya están construidos los puentes de Dúrcal, Talará, Tablate, Isbor y Guadalfeo. Siguen en estudio los puentes de fábrica de Torrente y del Pleito. La misma noticia se incluye en las memorias de los años siguientes. En la memoria del período 1912 a 1916 siguen apareciendo en estudio los puentes de Torrente y del Pleito, que acaban siendo construidos finalmente en 1917.
Construido sobre un estrecho y profundo tajo de más de 30 m. de profundidad, constituyó, hasta la construcción del nuevo puente (GR-1041/9), paso obligado en el acceso occidental a las Alpujarras. Por esta razón tuvo gran importancia estratégica en la conquista de Granada y en la posterior sublevación de los moriscos.
Según Madoz "Sonó mucho este lugar en la revolución de los moriscos contra los decretos de Felipe II. Los sublevados rechazaron en el puente de Tablate a las tropas mandadas por Diego de Quesada; y el Conde de Tendilla que consiguió después pasarlo y penetrar hasta el pueblo encontró este desierto y saqueado (1568). Al año siguiente volvieron a ocuparlo los moriscos por medio de un recio ataque que con muerte de unos, obligó a otros a refugiarse en la iglesia, dónde perecieron quemados con el edificio y otros fueron socorridos por el capitán D. Alvaro Manrique, el cual con 140 infantes y 200 caballos, derrotó completamente a los moriscos".
Pedro Antonio de Alarcón relata otro hecho de armas, que tuvo como escenario este mismo puente, también durante la sublevación de los moriscos:
"El 10 de Enero de 1569; es decir, diez y siete días despues de la elección de ABEN-HUMEYA; hallándose ya éste en el corazón de la ALPUJARRA, y alzada en su favor la mitad del Reino granadino, el MARQUES DE M0NDEJAR, que había salido de la capital en busca de los insurgentes, con una división de dos mil infantes y cuatrocientos caballos, llegó a la vista del Puente de Tablate...
"Los rebeldes (dice un historiador), en número de tres mil quinientos, capitaneados por GIRON DE ARCHIDONA, por ANACOZ y el RENDATI, se habían atrincherado en la cuesta y colinas que dominan por la parte de Lanjarón, y cortado el Puente de Tablate, que facilita el paso de un barranco profundísimo. EL MARQUES llevaba ordenada su gente en batallones y protegida por una manga de arcabuceros y una vanguardia de corredores.
"Al llegar a los visos inmediatos al Puente, se divisaron las partidas moriscas, formadas bajo banderas blancas y coloradas, con ánimo de defender el paso. EL MARQUES se adelantó con los arcabuceros y rompió el fuego, que fue contestado; pero como los arcabuceros cristianos hiciesen estrago en los enemigos, cedieron éstos y se alejaron algún trecho, en persuasión de que era imposible pasar por el puente desbaratado .
"Dió ejemplo a los soldados y terror a los moriscos un fraile francisco, llamado FRAY CRISTOBAL MOLINA, el cual, con un crucifijo en la mano izquierda, una espada en la derecha, los hábitos cogidos en la cinta y una rodela a la espalda, llegó al paso, se apoyó en un madero, saltó, y, cuando todos esperaban verle caer, se admiraron de contemplarle salvo en la orilla opuesta.
"Siguiéronle dos soldados animosos: uno cayó y murió en lo hondo; el otro fue más afortunado. Recompusieron éstos los maderos al abrigo del fuego de los arcabuceros; facilitaron el paso a otros, y, últimamente, rechazados los moros, y consolidado el puente con tablones y piedras, pasó toda la división con caballos, carros y artillería, y se alojó en Tablate. El MARQUES peleó como soldado en primera línea, y, al no haber sido por la fortaleza de su coraza, que le aplastó una bala, hubiera perecido".
Para finalizar digamos que aunque el puente se mantiene en pie y a corto plazo no peligra su integridad, muestra signos de deterioro que aún se podrían subsanar sin excesivo coste.
Durante la guerra del 36 fue volado un puente metálico en la C-332, cerca de Cherín, en el limite provincial entre Granada y Almería. Otro puente que tuvo las cargas de dinamita puestas es el GR-1042/ /10, en la carretera Granada-Motril, S/R Isbor. Afortunadamente una contraorden evitó la voladura.
